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June 14th is the American Flag Day. The fluttering Stars and Stripes carry the spirit of freedom passed down from generation to generation. On the key rings of countless Americans, a rose metal buckle inlaid with the national flag pattern is telling a deeper belief with a small but firm attitude. This key ring is not as big as the palm of a hand. The rose petals are stacked and blooming like the torch in the hand of the Statue of Liberty. The Stars and Stripes outlined in red, white and blue enamel are forever frozen in the center of the flower. It is not only a tool to open the door, but also a symbol of responsibility and honor. Every moment of turning the key reminds the wearer: the desire to protect this land should grow as blazingly as a rose; the commitment to fulfill the spirit of the founding of the country must withstand the test of time like metal forging. George, a veteran of World War II, always has such a keychain in his pocket. He said, “Every time I touch the raised five-pointed star, it’s like touching the beating heart of patriotism.” Community volunteer Emily hung it on the first aid kit, “The curvature of the petals reminds me that kindness needs to actively extend its branches like a rose blooming.” From the rose badge on the lapel of the soldiers of the War of Independence to the Stars and Stripes decoration on the key rings of modern people, this miniature belief has never faded. When we gaze at this metal rose in the daily trivialities, we see not only a decoration, but a contract to water the ideal with action – the integrity and persistence in every ordinary day is a silent tribute to this land of stars and stripes.

Juneteenth es el Día de la Bandera Estadounidense. La bandera estadounidense ondeante transmite el espíritu de libertad transmitido de generación en generación. En los llaveros de innumerables estadounidenses, una hebilla de metal rosa con incrustaciones de un patrón de bandera nacional expresa una creencia más profunda en un gesto pequeño pero firme. Este llavero es más pequeño que la palma de una mano. Los pétalos de rosa están apilados y floreciendo como la antorcha en la mano de la Estatua de la Libertad, y la bandera estadounidense delineada en esmalte rojo, blanco y azul está eternamente congelada en el centro de la flor. No es sólo una herramienta para abrir la puerta, sino también un símbolo de responsabilidad y honor. Cada momento de girar la llave recuerda a quien la lleva: el deseo de proteger esta tierra debe crecer tan fervientemente como una rosa; El compromiso de practicar el espíritu de la fundación del país debe resistir la prueba del tiempo como la forja del metal. George, un veterano de la Segunda Guerra Mundial, siempre tiene un llavero como este en su bolsillo. Dijo: “Cada vez que toco la estrella de cinco puntas, es como tocar un corazón palpitante de patriotismo”. La voluntaria comunitaria Emily lo cuelga en el botiquín de primeros auxilios: “La curvatura de los pétalos me recuerda que la bondad necesita estirar activamente sus ramas como una rosa en flor”. Desde la insignia de rosa en las solapas de los soldados en la Guerra de la Independencia hasta la decoración de la bandera estadounidense en los llaveros de la gente moderna, esta creencia en miniatura nunca se ha desvanecido. Cuando contemplamos esta rosa de metal en nuestra vida cotidiana, no vemos sólo un adorno, sino un contrato que riega nuestros ideales con acción. La integridad y la perseverancia en cada día ordinario son un tributo silencioso a la tierra de las estrellas y las rayas.